Una bella mujer que a través de su trabajo embellece a otras.
Adriana González, es una hermosa mujer de 28 años de edad que ama apasionadamente su profesión y se llena de satisfacción embelleciendo a otras mujeres. Todo lo que Adriana ha logrado, lo ha logrado con mucho esfuerzo y sacrificio.
Adri estudió durante 3 años estilismo profesional, combinaba el tiempo de trabajo con el tiempo de estudio, después complementó su profesión con especialidades en barbería profesional, maquillaje profesional, estética y asesoría de imagen. Recientemente, gracias a que fue ganadora del concurso Trend Vision 2015 de Wella Professionals, obtuvo un título internacional que la certifica como máster en color y corte otorgado por la Academia Vidal Sassoon de Miami.
Su pasión por ser estilista inició desde muy pequeñita, cuando me reuní con Adriana me comentó que, para su cumpleaños y navidad, solo pedía secadoras, tijeras y peines para cortarle el cabello y peinar a sus muñecas.
Esta valiente y emprendedora mujer, después de trabajar para otro estilista en un salón de belleza muy alejado de su casa, decidió tomar riegos y empezar a cumplir su sueño. Hace 5 años, los cuales describe como muy exitosos, Adri abrió su propio salón llamado Chic Art y desde entonces su sueño se convirtió en una realidad, la cual vive con mucha entrega y pasión.
«Mi secreto es ser tan apasionada por lo que yo hago, la pasión produce amor y el amor lo cambia todo.»
Los sueños de Adriana aún no acaban y ella trabaja todos los días para llegar a alcanzarlos, desea con todo su corazón enseñar a otros y trasmitir sus conocimientos para que a través de estos se formen grandes estilistas profesionales no solo con mucho talento sino también con pasión.
Me siento muy orgullosa de que Adriana sea una de nuestras mujeres T&T, definitivamente su profesión requiere de mucha entrega y ella combina a la perfección su trabajo con el tiempo que dedica a hacer ejercicio y salir con sus amigas, lo que le permite un balance adecuado, indudablemente es una mujer que pasa sus días entre tenis y tacones.
